La mamá de esta niña tenía muy claro que quería organizarle a su hija una comunión muy bonita y dulce, que querían comer estupendamente bien y necesitaban un espacio que estuviera en Barcelona con jardín para que los niños pudieran jugar.
El equipo de Sophie Kors se decantó por la Torre Amat, una casa señorial en el barrio barcelonés de Sarrià , con toques modernistas y lo más importante, un jardín trasero con un encanto especial.
Montamos una mesa imperial donde los colores pasteles, sobre todo el rosa fue el protagonista.
Un catering excelente nos ayudó a que todo fuera perfecto y las dos mesas de Candy bar coronaron una comunión fantástica.
Para las niñas se montó un taller de maquillaje, hubo una actuación de un showman que hizo magia pero lo que realmente hizo fue sacar carcajadas a todos los asistentes y por último, nuestro Dj estuvo pinchando las canciones preferidas de la niña y anfitriona de la comunión.
Fotografía: Laia Ylla