Es posiblemente el complemento estrella del vestido de novia, pero todas ellas se preguntan en algún momento si van a llegar velo o no el día de su boda y nosotras siempre les contestamos lo mismo, y es que depende del vestido.
Hay modelos que lo piden a gritos, otros en cambio no admiten velo alguno.
La tradición de llevar velo es milenaria, en épocas medievales el velo servía para proteger a la novia de los malos espíritus y significaba su pureza y castidad. Entre tanto, en occidente, el velo era un lujo y estaba reservado solo a la nobleza ya que debía elaborarse a mano y era extremadamente costoso.
Actualmente el velo vuelve a ocupar un lugar destacado que se asocia con la elegancia y solemnidad.
Los materiales más comunes para el velo son el encaje, la organza, el tul, chantillí o la gasa blanda. También pueden llevar ornamentos como pedrería, bordados o puntillas.
Los velos pueden ser solo de una capa de tela, que cae por la parte posterior del vestido o de dos capas, donde una de ellas es más corta y se desliza por delante del rostro de la novia y la otra cae por su espalda.
Existen dos grandes grupos de velos.
Velos cortos
De estilo francés
Sirven solo para cubrir la cara. Están confeccionados en gasa, tul o red. Dan un look muy vintage.
Blusher
Debe tocar justo el hombro de la novia y suele combinar con otra capa trasera más larga. Tiene mucho volumen y es el típico velo que el novio se encarga de retirar hacia atrás justo en el momento del beso.
Velo hasta el codo
Llega hasta la cintura o codo de la novia. Es ideal para bodas civiles.
Velos largos
Velo mantilla
Es el que tiene el mismo largo que el vestido de la novia, pero no cubre el rostro sino que lo deja despejado. Es como llevar una capa y se caracteriza por sus encajes.
Velo capilla
Es el que llega hasta los pies y se prolonga no más de 10 cm.
Velo catedral
Este se prolonga como mínimo sobre los dos metros después de tocar el suelo.
Nuestro consejo a la hora de escoger el velo es que si vuestro vestido es muy cargado, lleno de detalles de pedrería, optéis por un velo más discreto que quede en un segundo plano, en cambio para vestidos sencillos y lisos, los velos de encaje son los ideales.
Tendencias 2018
Las últimas tendencias en velos para este 2018, son los velos capilla o catedral, que te harán sentir cono una auténtica princesa.
El tejido para este tipo de velo es el tul con mucha caída.
En cuanto a los adornos, estos están cada vez más trabajados y otra de las tendencias para este año son los velos de plumeti, a nosotras nos encanta y es el tejido romántico por excelencia.
Fuentes: Wedding Guides, Style me Pretty, Sara Lobla, Mahmure, Best wedding veil, Paredero Quirós.